top of page

Vivir con propósito

Actualizado: 21 ago 2024


ree

Sabes que estás viviendo con propósito si te sientes satisfecho. Tu propósito, en pocas palabras, es convertirte en la persona que estás destinada a ser. Tu propósito es tu amorosa contribución al mundo. Tu propósito hace que te sientas vivo.


Es común tener miedo a brillar mucho, casi tan grande como el miedo a fracasar. Sin embargo, cuando huimos de nuestro propósito, nos creamos muchos problemas y obstáculos.


Quizá una de las causas más frecuentes de la depresión es no cumplir tu propósito, sentir que tu vida no tiene sentido. Y aun así, puedes sentir que hay conflicto entre quien piensas que debes ser (tu condicionamiento) y quien naciste para ser (tu propósito).


Es común evitar vivir nuestro propósito porque las visiones que tenemos sobre ayudar y cambiar al mundo pueden parecer imposibles de ejecutar. Es mucho más fácil tener muchos problemas emocionales, físicos o prácticos que resolver antes de hacer lo primero.


Tu propósito de vida siempre tiene que ver con conectar con otras personas de manera amable y servicial. Puedes decir que tu propósito de vida es tu forma de amarte a ti mismo, a la vida y a los demás. Tu propósito es lo que más quieres hacer, y tambien es lo que mas temes hacer.


Gran parte de tu propósito de vida es permitirte crecer. Esto implica hacer un honesto trabajo interno. A medida que sanas emocionalmente, verás con más claridad tu propósito de vida.


Todos tenemos indicios de lo que necesitamos hacer para convertirnos en la mejor versión de nosotros, y lo podemos ir haciendo poco a poco. Siguiendo intuitivamente nuestros intereses, encontraremos nuestro lugar en la vida.


Hacer diario algo siguiendo tu intuición, es básico para que te conectes con tu propósito de vida. Y tomar acción no debe ser abrumador: dar un pasito cada día te llevará lentamente hacia una vida muy significativa.


A veces, las personas creativas pueden tener visiones de cosas muy grandes, y éstas a veces pueden parecer intimidantes.


Grande o pequeño, todos tenemos un rol a desempeñar. Nuestro propósito colectivo es que cada quien toque un instrumento en la sinfonía de algo mucho más grande.


Si tu propósito se siente demasiado grande, no te desanimes. Puede ser algo más grande que tu propia vida, incluso puedes empezar a realizarlo hasta cierto punto, y luego inspirar a otras personas a que continúen.


En sesiones con coachees, me he topado con personas que no saben cuál es su propósito de vida, que sienten cierto vacío interior. Pueden tener muchas cosas materiales, viajar, una vida aparentemente feliz, pero queda esa sensación como de nostalgia o anhelo por algo. Si eres una de ellas, empieza a hacer cosas que te parezcan significativas, cosas que internamente sabes que te interesan o te gustaría hacer (aunque seas el único de tu familia que lo hace, o incluso si tu círculo cercano lo ve “raro”. Incluso preguntate cómo te gustaría que te recordaran cuando mueras, qué te gustaría dejar en la mente y el corazón de los demás. Y ojo: tu propósito de vida no TIENE que ser enorme, no tienes que buscar lograr la paz mundial, solucionar el problema del hambre, etc., pero sí debe ser algo que te llene totalmente de esa sensación de satisfacción y paz, de saber que estás haciendo algo trascendente, así el impacto sea sólo en tu familia, y sobre todo, que te haga feliz.


Comentarios


bottom of page